Todas hemos pasado por una etapa de nuestras vidas en la cual nuestras pobres madres, si, NUESTRAS POBRES MADRES, han pasado de ser «Mi mami es la mejor del mundo» a ser «La Loca de mi Vieja»
La Casi Diez cumplió los diez hace un rato ya. Entró en la pubertad y por la misma puerta entre yo al catálogo de madres locas, incomprensibles e incomprendidas. A la sección de viejas locas.
¿Te acuerdas cuando tenías 10, 13, 15… y sentías que tu madre no te entendía? ¿Te acuerdas lo injusta que podía ser? ¿Cómo te contestaba cosas que provocan en ti el llanto inmediato y las ganas locas de salir corriendo a tirar la puerta de tu cuarto mientras ella se quedaba con cara de pócker, haciéndose la loca, como si no entendiera que te hizo sentir mal ? ¡Pues SORPRESA! ¡No se hacía! En verdad.. simplemente no lo entendía…
¿Y si la vieja loca… no estaba tan loca… y tal vez, solo tal vez las medio locas eramos nosotras?
«La pubertad y adolescencia es una etapa tan hermosa como difícil»… vaya noticia, eso ya lo sabía… para lo que no estaba preparada era para que fuera tan difícil para mi también!
Desde sus ojos paso de ser su madre adorada a la bruja malvada en cuestión de 3 pestañadas. De ser su confesora a su rival en solo dos comentarios. De saberlo todo a no saberlo nada constantemente… nunca fui tan bipolar en mi vida, ya no soy una madre. Creo que tengo problemas de doble personalidad, hasta ahora no me había dado cuenta… soy Dr Jekyll y Mr.Hyde.
Y así una vez más sin darme cuenta me encuentro otra vez evocando frases mamísticas tatuadas en mi ADN, «Hija ponte algo de manga larga encima para ir al cole» «Por que hace frío para ir en BVD amor» «Ya se que es lindo, pero no vas a un desfile de modas, vas al colegio», «Si, por que lo digo yo», «No me contestes así, más respeto señorita» «¡¿Y encima vas a llora tu?! Debería llorar yo por como me contestas!» «No tires la puerta» tarde ya la tiró, ya me odió y ya está llorando.
Ahora encima la debería de cuadrar.. o no? Nada. Respirar hondo, mantener la calma, o encontrarla en el fondo de un cajón y hablar. Hablar con ella, una y otra vez. Recordarle que no soy el enemigo, que soy su madre, que entiendo que pierda el control pero que no puedo permitir que me pierda el respeto. Que la amo con todo mi alma y con lo que me queda de cordura, que estoy para ayudarla no para atacarla.
Y sobre todo hija mía, espero que entiendas que en los próximos años sufriré ante tus ojos de un trastorno de personalidad multiple y pasaré de ser tu madre adorable de hija maravillosa a la vieja loca de hija adolescente, en un suspiro o tres pestañadas, en el momento que menos lo esperes y más lo necesites, por que así nos hacemos grandes. Pero tranquila mi amor, será un trastorno temporal. Te prometo que alrededor de tus 18 recuperaré mi salud mental, me curaré de los trastornos de doble personalidad, encerraré a la vieja loca en un cajón con llave y quedará a tu lado tu madre, la adorable, para amarte y entenderte siempre….
…Siempre y cuando en esos años no pierda la cordura y la paciencia por completo!
– La Tata, pasé de hacer bancos de leche a hacer bancos de paciencia.
No tengo una niña pero mis dos niños me hacen estar en la misma bipolaridad y de pronto me encuentro con el mismo tono y énfasis que mi vieja, diciéndole al casi 8 :»hey ! Mírame cuando te hablo!» O «lo único que tienes que hacer es estudiar, nada más !», «mueve las cosas, las medias no saldrán a decirte ¡aquí estoy!» … buuuuuuu que alegría sentirme acompañada 🙂
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Me pasa lo mismo que a Lorena 🙂 No tengo hijas, pero mis dos hijos me han hecho ver y darme cuenta que digo y me he vuelto igual que mi madre! Las mismas expresiones, las mismas palabras, ¡que horror! ¿Tengo que decirlo otra vez? ¿Pasas por encima y no recoges? etc etc, Sin embargo, adoro a mi madre ahora que la tengo lejos extraño todas esas palabras. 🙂
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Hola me encanta como escribes y comparto casi todos tus posts. Pero hay algo en lo que definitivamente no estoy de acuerdo: la forma en la que te refieres a tu hija. Ok si lo haces por diversión y para que tus lectores se diviertan, pero ella no lee lo que escribes? Crees realmente que a su edad es capaz de entender tu ironía? No deberíamos ser nosotras las mamás quienes protegemos a nuestras hijas de etiquetas y prejuicios?
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Hola Cynthia, gracias por seguirme y por tu comentario. Tienes toda la razón,somo nosotras las primeras que debemos proteger a nuestros hijos, a nuestra familia. Por eso en ningun post cuentos cosas privadas de mis hijos.Y las cosas que escribo en general sobre sentimientos y situaciones sobre todo con mi ya casi casi once, son cosas que llevamos tiempo conversando, entre las dos, con la familia, con los amigos, que ya están asimiladas y sobre las que ella misma bromea. Si bien no soy ni quiero ser su amiga por que soy su madre, tenemos una relación muy estrecha de mucha confianza que nos está ayudando a llegar de una manera sana y honesta a la adolescencia. Donde reconocemos abiertamente que es normal pasar por estos cambios de sentimientos y lo hacemos de forma abierta. Me encanta tu preocupación, dice mucho de ti.Espero que más mamás y blogueras lo compartan. Es difícil escribir sobre esta edad. Leo y releo para saber que no la expongo y que no le molesta lo que escribo. Por suerte es mi mayor fan♥ Gracias, por tus comentarios por que me hacen tener la antena aún más alerta (:
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