Archivo por meses: julio 2014

A punto de convertirme en «La Loca de mi Vieja»

Todas hemos pasado por una etapa de nuestras vidas en la cual nuestras pobres madres, si, NUESTRAS POBRES MADRES, han pasado de ser «Mi mami es la mejor del mundo» a ser «La Loca de mi Vieja»

La Casi Diez cumplió los diez hace un rato ya. Entró en la pubertad y por la misma puerta entre yo al catálogo de madres locas, incomprensibles e incomprendidas. A la sección de viejas locas.

¿Te acuerdas cuando tenías 10,  13, 15… y sentías que tu madre no te entendía? ¿Te acuerdas lo injusta que podía ser?  ¿Cómo te contestaba cosas que provocan en ti el llanto inmediato y las ganas locas de salir corriendo a tirar la puerta de tu cuarto mientras ella se quedaba con cara de pócker, haciéndose la loca, como si no entendiera que te hizo sentir mal ? ¡Pues SORPRESA! ¡No se hacía! En verdad.. simplemente no lo entendía…

Imagen2

 

¿Y si la vieja loca… no estaba tan loca… y tal vez, solo tal vez las medio locas eramos nosotras?

«La pubertad y adolescencia es una etapa tan hermosa como difícil»… vaya noticia, eso ya lo sabía… para lo que no estaba preparada era para que fuera tan difícil para mi también!

 

Desde sus ojos paso de ser su madre adorada a la bruja malvada en cuestión de 3 pestañadas. De ser su confesora a su rival en solo dos comentarios. De saberlo todo a no saberlo nada constantemente… nunca fui tan bipolar en mi vida, ya no soy una madre. Creo que tengo problemas de doble personalidad, hasta ahora no me había dado cuenta… soy Dr Jekyll y Mr.Hyde.

Y así una vez más sin darme cuenta me encuentro otra vez evocando frases mamísticas tatuadas en mi ADN, «Hija ponte algo de manga larga encima para ir  al cole» «Por que hace frío para ir en BVD amor» «Ya se que es lindo, pero no vas a un desfile de modas, vas al colegio», «Si, por que lo digo yo», «No me contestes así, más respeto señorita» «¡¿Y encima vas a llora tu?! Debería llorar yo por como me contestas!» «No tires la puerta» tarde ya la tiró, ya me odió y ya está llorando.

Ahora encima la debería de cuadrar.. o no? Nada. Respirar hondo, mantener la calma, o encontrarla en el fondo de un cajón  y hablar. Hablar con ella, una y otra vez. Recordarle que no soy el enemigo, que soy su madre, que entiendo que pierda el control pero que no puedo permitir que me pierda el respeto. Que la amo con todo mi alma y con lo que me queda de cordura, que estoy para ayudarla no para atacarla.

Y sobre todo hija mía, espero que entiendas que en los próximos años sufriré ante tus ojos de un trastorno de personalidad multiple y pasaré de ser tu madre adorable de hija maravillosa a la vieja loca de hija adolescente, en un suspiro o tres pestañadas, en el momento que menos lo esperes y más lo necesites, por que así nos hacemos grandes. Pero tranquila mi amor, será un trastorno temporal. Te prometo que alrededor de tus 18 recuperaré mi salud mental, me curaré de los trastornos de doble personalidad, encerraré a la vieja loca en un cajón con llave y quedará a tu lado tu madre, la adorable, para amarte y entenderte siempre….

sueña…Siempre y cuando en esos años no pierda la cordura y la paciencia por completo!

– La Tata, pasé de hacer bancos de leche a hacer bancos de paciencia.

Jugar en familia, recuerdos para toda la vida.

De chica me encantaban los juegos de mesa, pero les confieso que ahora, como madre,  me gustan mucho más.  Mi flaco, la casi diez, mi chiquito y yo hemos encontrado en esta actividad un divertido y enriquecedor espacio familiar.

El juego es esencial en el desarrollo, físico, mental y emocional de nuestros hijos y los juegos de mesa además ayudan a desarrollar la agilidad mental, la sana competencia, aprenden a ganar y perder, a jugar en grupo respetando turnos y reglas, y es un espacio en donde todos, grandes y chicos, padres e hijos están en el mismo nivel y tratando de conseguir el mismo objetivo. Además, lo más importante, es que nos estamos divirtiendo juntos, estamos compartiendo, riendo, emocionándonos, picándonos  y jugando como camada.

Es maravilloso  ver la cara de los chicos cuando honestamente y por su propio esfuerzo ganan. La satisfacción en su cara es todo. Ríen, saltan en la cama y bailan ¡OH SI, GANÉ! ¡OH SI, GANÉ! Y es que en este espacio, todos somos iguales, las reglas y posibilidades son las mismas para los cuatro, es nuestro momento democrático.

Es cierto que una tiene 10 y el otro 7 y con eso se han abierto un sin número de posibilidades de juegos. Si tus hijos son chiquitos tranquila, existen muchos juegos de mesa geniales que pueden jugar (o también puedes hacer un equipo con el más pequeño como hacía yo con Nacho). Lo genial es que se vaya haciendo una costumbre desde chicos, que se vuelva una tradición jugar en familia. Son recuerdos que tus hijos atesorarán toda la vida.

Yo me imagino a la casi diez y a mi chiquito cada uno con su tribu viniendo a jugar los sábados por la tarde dónde los abuelos. ¿Te imaginas flaco? ¿Que linda estampa no? Es algo que estoy segura que va a pasar, por que para nosotros ya es una tradición, ya es una costumbre familiar, ya es nuestro espacio de diversión.

Acá te cuento alguno de los juegos favoritos de mi tribu y sus beneficios:

juego1

Memoria:

Básico y esencial. Pueden jugarlo desde que son chiquitos y así ayudar no solo a desarrollar su memoria si no también su desarrollo verbal. La casi diez es una campeona, yo siempre empiezo con buena racha, pero al final se me confunde todo!

 

juego 5

 

Pictureka:

Ideal también desde pequeños.  Agilidad visual y también verbal. Se trata de encontrar el elemento elegido entre todos los dibujos.

Es divertidísimo. En este los chicos son mucho mejores que yo. ¿Será que debo jugar con anteojos?

 

juego 6Adivina Quien:

Entre los 4 y 6 fue el favorito tanto de Fer como Nacho. Es un juego buenísimo para el desarrollo de vocabulario y agilidad visual. Es muy fácil de jugar y a los más chiquitos les encanta. Si tienes que hacer un regalo, te lo recomiendo!

juegos 8

Minotauro:

Este juego se lo regaló a Nacho uno de sus mejores amigos por su cumple hace un par de semanas. Lo hemos jugado ya como diez veces.

Es una versión de Lego del clásico Ludo. Se trata de llevar a tus personajes al centro a través del laberinto, sólo que a diferencia del clásico Ludo, en este hay obstáculos que sortear y un Minotauro que vencer. Muy divertido. Gracias Joaco!

 

juego 3Pictionary: Clásico y versátil juego de adivinanza. Puedes jugarlo dibujando o con mímica. De las dos formas tienen risas aseguradas. Buenísimo para la agilidad mental y si lo hacen con mímica para vencer la vergüenza y aprender a reírse de uno mismo.

juego 4Scrabble: 

Hay el Scrabble de toda la vida y ahora también una versión Junior ideal para los niños que están aprendiendo a escribir. Esta versión junior se las recomiendo para cuando empiezan la lecto escritura. Aprenden jugando.

 

juegos 7Too Late

Otra nueva adquisición. Regalo de mi adorada Minime. Este juego no lo conocíamos y es buenísimo! Tienes que ir adivinando las palabras que te sugiere la tarjeta, y cada vez que usas una letra debes bajarla. Cada vez tienes menos opciones de letras, por lo tanto de palabras. Al final el que adivina más gana. Nacho es el campeón oficial de este juego. Excelente para ampliar vocabulario y cultura general. Un éxito de juego para toda la familia.

juego 2Monopolio:

Clásico de clásicos.

¿Lo mejor de este juego? Nos recuerda nuestra propia infancia jugando con nuestros papás y primos. Cuando eramos chicos era casi el único juego de mesa que existía.

 

Creemos tradiciones, abramos espacios familiares, fortalezcamos lazos, compartamos más, riamos juntos, juguemos en familia.

-La Tata, esperando que estén todos listos para jugar.

 

 

 

 

 

 

Receta: Galletas de frutas

Imagen1Las galletas de frutas son unas de mis favoritas. Son deliciosas y nutritivas  Las puedes hacer de manzana, durazno o pera, aún no lo intente pero creo que con mango quedarían deliciosas también.

Anímate y prepáralas con tus hijos, son muy sencillas de hacer. Pasarán un divertido rato juntos cocinando algo que podrán compartir en familia. Si les provoca podrían preparar más para que lleve al colegio e invite en la lonchera. ¿Te imaginas su cara de orgullo invitándole en el recreo las galletas que ellos mismos prepararon a sus amiguitos y la profe?

Acá te doy la receta

Ingredientes para la Masa:

2 1/2 tazas  Harina sin preparar

1/2 cucharadita de sal

1/4 de taza de azúcar  rubia

200gr de mantequilla (puede ser margarina)

5 cdas (o lo necesario) de agua helada)

 

Ingredientes para el relleno:

1 Manzana

1 Pera

1 durazno

1/4 de taza de azúcar rubia

1 cda canela

2 cdas maicena

2 cdas mantequilla

15 gramos pecanas

15 gramos almendras

1 yema

 

Preparación:

2– Calienta el horno a temperatura fuerte

– Cierna la sal, el azúcar y la harina

– Agregar a los ingredientes secos la mantequilla fría y deshacerla con los dedos mientras la mezclas con los demás ingredientes. Quedará como una arena gruesa.

– Añade el agua helada de a pocos hasta que se una todo en una masa homogénea.

– Guarda la masa en una bolsa plástica o papel film durante media hora en la refri.

– Mientras la masa está en la refri, avancemos con el relleno.

-Corta las frutas en trocitos y ponlas cada una en un pequeño recipiente

– En otro recipiente mezcla el azúcar con la canela y maicena, mezclalo bien.

1– Hecha esta mezcla en los tres bowls de fruta y pica las frutas secas.

– Pasada la media hora saca la masa de la refri. Espolvorea con harina la mesa y tu rodillo y estira la masa.

-Con un  vaso pequeño o un cortador de galletas redondo corta círculos en la masa. Ideal de 10 a 15 cm de diametro

galletas 1– En el centro del círculo poner primero un poquito de frutos secos picados y luego un poco de fruta (puede ser solo de un tipo o mezcladas)

-Dobla el borde de la masa hasta encima del borde de la fruta. Pon un poquito de mantequilla encima de cada galleta.

 

 

galletas 2.jpg Con un pincel pinta el borde de las galletas con la yema de huevo.

4

 

 

 

 

 

 

– Hornealas 10 minutos a fuego alto y 10 minutos a fuego bajo.

¡Déjalas enfriar y a disfrutar!

 

 

 

 

 

Yo no elegí un parto natural, el parto natural me eligió a mi.

Cuándo estaba embarazada de Fer, ninguna de mis amigas había sido madre aún. Los últimos partos que había vivido de cerca eran los de mis hermanos, cuando una cesárea no se hacía al menos que fuera estrictamente necesaria.

Cuando estaba de menos de 6  meses de embarazo me subí en un avión y crucé el charco, supuestamente por vacaciones, por cosas del destino que les contaré en otro post decidimos quedarnos y no volver . Hasta ese momento había tenido unos cuantos controles y ecos en Lima pero aún no habíamos hablado nada del parto, y la verdad, tenía tantas cosas en la cabeza en cuanto a nuestro futuro como familia, que yo tampoco pregunté. Parece mentira, pero en ese momento no era la mayor de mis preocupaciones.

Cuando decidimos quedarnos en España, yo ya estaba de 7 meses. Tampoco allá conocí en ese tiempo a nadie que hubiera parido.  Así que no tenía mucha información de como sería o lo que me esperaba. Fui al centro médico del barrio donde me vio un ginecólogo un par de veces para controles médicos, pero mis citas regulares eran con esta mujer maravillosa, «La Matrona».

La Matrona me habló siempre de parto natural, como si no existiera ninguna otra opción, me sugirió las clases de prenatal, «Si te provoca» me decía, «La verdad, es que toda mujer sabe parir, es tu instinto» Me recordaba.   «Te va a doler un poco, pero nadie se muere por dolor de parto, y la verdad no es tan fuerte, pasa» . «Cuando estés con contracciones cada 3 o 2 minutos y con ganas de pujar, recién ahí vienes, hasta entonces quédate cómoda en tu casa, camina y tranquila» Me decía con voz plácida. «¿Que ya perdiste el tapón? No pasa nada, no te bañes en tina, sólo duchas, te faltan 10 días o más, hay que esperar», decía calmándome.  «Si el parto se retrasa, no pasa nada, si la bebe está bien se espera, si ya va más de una semana, si has pasado la 41 ten relaciones para que liberes oxitocina y sea una inducción natural», me recomendaba sin imaginarme el lujo de consejo que me daba. » A penas nazca tu hija, lo primero, la teta, así te recuperarás pronto, el útero se contraerá antes y tendrás más leche»  «Escúchate, es cuestión de instinto, todas las madres sabemos parir» Todo me lo decía como si no existieran otras opciones, y yo le creía, hoy le creo y le agradezco.

Fue así como, por cosa del destino, 3 meses, 2 días después de haber llegado a España, siendo madre primeriza caí en un parto natural y respetado, sin pedirlo, sin saberlo, y hoy agradeciéndolo mucho.

Pero lo cierto es que así como le creí todo a la matrona, por que no tenía más información que la que ella me daba, también le hubiera creído todo a un doctor que me hubiera dicho que lo mejor era una cesárea por que había perdido el tapón, o una inducción por que ya tenía contracciones y aún no había dilatado.

No se si no hubiera caído en manos de esta mujer maravillosa si yo hubiera buscado información por mi cuenta, recordemos que parí hace más de 10 años y no todos teníamos una computadora con Internet en casa. Lo cierto es que lo que ella me decía me gustaba, me hacía conectar conmigo misma y me era fácil creerle, me enseñaba a conectar con mi instinto.  No se si hubiera creído igual en un doctor sugiriendo una cesárea, tal vez si, tal vez no. Tal vez me habría informado más, tal vez no me hubiera dado tiempo de hacerlo, quien sabe, tal vez si, tal vez no, aunque lo cierto, es que siendo madre primeriza sin información, creo que me habría entregado por completo y habría confiado ciegamente.

Lo que tuve fue suerte… lo que necesitaba era tener información.

Tener información era mi responsabilidad, no era culpa de nadie más. Debí leer y preguntar más, no debí solo dejarme llevar. .

La información empodera queridas, lean, infórmense, cuestionen y comparen y finalmente decidan basándose en su corazón y en sus entrañas. Escuchen a su instinto siempre y para todo. Las respuestas en torno a nuestra maternidad y crianza , son nuestras, las tenemos dentro, las tenemos siempre, pero para poder decidir y confiar en nostras necesitamos conocer, saber, informarnos.

-La Tata, informándose y empoderándose♥